Mientras tu mirada

intenta

eludirme

dejando tras de si

un aroma con dejo a besos

con rastro a deseo manifiesto

yo

abrigo y arranco

desde el centro de tu vientre

un destello

una rosa

un terciopelo eléctrico

Aún no te toco

pero mis manos

invisibles te presionan

sutilmente

con un aire denso de poder

Mis labios casi rozan

en tu cuello que palpita

un torbellino

Un silencio

precipicio que llama

tu respiración que pierde su ritmo

te delata

yo

una sombra desafiante

comienzo a abrazarte

y a cruzar tu piel

que ya esta encendida.

ASTILLAS

Quien no quisiera ser completamente feliz
y en solo trece paginas resumir
el agasajo de toda una vida
guardando en silencio fatuo sus ruegos
a dioses e invisibles padres tutelares
Todos somos recién llegados
a la hora de mostrar victorias
ante el dolor y la avaricia
por que avaros somos de amores y cariños
aunque nos resulte sano mostrar una cara diferente

La partitura de cada día
es siempre afable a la hora de juzgarnos
nuestros despilfarros de egoísta emoción
Un tejido indefenso de recuerdos cariñosos

nos ata y nos consuela
La epifanía dominguera
de la familia reunida nos reconforta
a veces
Pero los ataúdes vacíos
de amores no resueltos
o mal entregados
o incluso desperdiciados
nos dejan ese olor a astilla
ese manojo de flores secas
ese cofre de cartas nunca escritas

El recuerdo de la higuera
y yo escondido en su follaje
con siete años de sueños en el cuerpo
me recuerdan esa soledad
que no se va nunca de una parte
oscura del corazón
Por que no fue un naranjo?
o una higuera resuelta
quizás así hubiera sido algo diferente
desaforado recuerdo esa angustia
esa soledad incrustada
ese oscuro beso
procedente de un desconocido viejo en mi interior

El jardín de memorias
con este viejo amigo
tan cercano como mi piel o mi sangre
me deja siempre al filo de las letras que escribo
las aristas de sus contenidos indescifrables
me llevan a ese mundo
de perfil rotundo
de palabras sin muelles
de voces de ventisquero estallando en su caída al mar
el amanuense que soy
queda en este silencio valorado
en este barco que encalla siempre
y que a faltas y prisas
desciende
al mismo beso oculto
a mismo terciopelo ausente
de esa caricia que no llega
de ese afán
que no termina

UN SILENCIO

Como no decir que si??...
la mesa esta servida,
los ojos arrebatan toda duda.
La mañana abrió con un rotundo sol
y en mi ventana de agasajos transitorios
Se deslizó suave el beso de este día.
Como decir que no??...
no podría,
aún cuando a veces duelan las ausencias,
las palabras que no dije o los abrazos que partieron.
Este día tiene el sonido trémulo del reloj
y el susurro tenue de una hoja tirada al viento.
Mi corazón sigue su curso volcánico
y mi beso busca tímido tu boca.
Como no decir que si?...
Llama mi boca y tus ojos callan.

LA NOCHE ES UN OCEANO

El corazón me da vueltas,
la felicidad es un manojo de punteros en un reloj.
Los besos se me juntan todos
como la imagen de mi hija con su sonrisa de niña.
Es verdad…ya es una mujer o casi,
pero su mirada de niña sigue allí,
donde mis más queridos recuerdos pueblan y callan.
Ahora en estas tierras lejanas amarro mi barco,
extiendo mis velas y ensancho mis alas.
Ahora mi mujer duerme y pronto me acercare a ella y besare su espalda,
le diré al oído que la amo
y ella en sueños escuchara mi nombre de aguas.
Esta noche miro al océano de mis días
recojo mis redes y acaricio mis peces.
Mis peces que son días,
que son años,
que son besos.
Hay un amor rotundo que circula como sangre,
ese amor extenso que prodigo y regalo.
El corazón me da vueltas
y sonrío silente en esta noche de estrellas y océano.
Quizás tú que lees
en un barco tan cierto y tan volátilcomo el mío,
escuches.
Quizás tú que sueñas y callas,
quizás tú que cantas en medio de la noche,
escuches también mi canto
y puedas decir conmigo:
Amén y hasta la vista.
Estamos vivos.!

UNA VOZ EN LA NOCHE SIN FIN

Esta luna que no termina,
este barco que no zarpa…
A veces los sueños son rupturas que apresuran el paso
hacia un horizonte que uno no alcanza.
No quiero decir que estoy triste,

tampoco quebrado,
Solo es de esos tiempos

en los que el paso cansino de los días se hace eterno
y las señas de las cosas desconocidas.
En algún lugar de mi corazón se sabe

que esto y todo solo es transito,
Pero aún sabiéndolo

el reloj atraviesa como un cuchillo artero.
Los recuerdos dulces parecen escasos
y los dolorosos como si no murieran nunca.

Bueno es verdad…

Lo confieso,

estoy triste
y que hay de malo en ello,
no siempre se sabe todo,
no siempre se es imperecedero.
Ahora el pecho a su redil,
Ahora mis besos a su puerto,
yo descanso de mi ropaje
buscando una voz tenue

que me traiga una sonrisa.

EN LA AGITACION

En la agitación,
azotados por la lluvia.
Ebrios a bordo, sin destino.
Durmiendo en lechos como velas,
bendecidos
y al unísono crucificados.
Con la piel herida por la sal
en el vértigo del viaje.
Así la boca calla prefiriendo la sombra,
a veces por temor,
otras por cautela.
Viajando hacia un horizonte color violeta.
Arremetiendo entre la tormenta y la claridad.
Nuestros propios desaciertos
son a veces la brújula marcando el mapa
en el océano interminable de esta vida extensa.
Tratamos de conjurar el signo de nuestro tiempo,
convertido a veces en el triunfo de nuestra batalla diaria.
A veces el agua se junta,
se eleva y nos ahoga,
pero desde el centro de la tempestad
nos levantamos fuertes,
dignos en nuestra propia debilidad.
Sobrevivientes.
Inacabables.
Y aunque no se oye nuestra suplica de la forma que nos gustaría,
la lengua no nos atraviesa como cuchillo
y seguimos aún, al inconfundible amor.
Así,
en nuestra vestidura,
abrimos el corazón y levantamos vuelo.